

¿Quieres comer alimentos que sean buenos para ti y para el planeta? Fíjate en qué verduras utilizas en invierno. Las judías verdes, por ejemplo, tienen que recorrer un largo camino en los fríos meses de invierno. Esto es perjudicial para el medio ambiente, además de que las verduras son menos frescas y tienen menos vitaminas. Es mejor comer alimentos de temporada u optar por verduras que se puedan cosechar todo el año, como la remolacha.
Saludable, deliciosa y llena de color
¿Sabías que la remolacha es rica en vitaminas y minerales? Esta verdura, a menudo olvidada, es sana, colorida y sabrosa. Además, es muy versátil. He creado tres deliciosas recetas con remolacha para que las pruebes. Espero que te sirvan de inspiración para ponerte manos a la obra y, al igual que yo, utilizar una “nueva” verdura.


1. Hamburguesa de remolacha en un panecillo1. Bietenburger op een broodje
¡Comida reconfortante! Siempre me hace feliz un sándwich o una hamburguesa, y esta hamburguesa casera de remolacha no es una excepción. Se trata de una receta sencilla y sabrosa, ¡además de saludable!
Lo que necesitas para 4 hamburguesas:
- 3 remolachas crudas medianas (unos 500 gramos ralladas)
- 1 huevo
- 2 dientes de ajo
- 150 gramos de avena (finamente molida)
- 100 gramos de queso feta
- 1 chalota o cebolla roja pequeña
- una pizca de sal y pimienta
Pelar y rallar la remolacha, exprimir el ajo y cortar la cebolla roja en trozos pequeños. Triturar los copos de avena y desmenuzar el queso feta. Mezclar todos los ingredientes y añadir el huevo. Amasar hasta conseguir una masa sólida y formar 4 hamburguesas redondas.
Consejo: Colocar las hamburguesas sobre una hoja de papel de horno en la nevera. Así las hamburguesas no se desharán durante el horneado.
Hornear las hamburguesas por cada lado durante unos 5 minutos a fuego medio. Mientras tanto, preparar la salsa de ajo. ¡La salsa de ajo hecha en casa sabe mucho mejor que la salsa que compramos en el supermercado!
Lo que necesitarás:
- 1 cucharada de mayonesa
- 2 cucharadas de your desnatado
- 1 diente de ajo finamente picado
- una pizca de sal marina
- pimienta negra fresca y
- cebollino fresco (bonito, pero no necesario)
Y ahora... ¡monta tu hamburguesa! Coge los panecillos de hamburguesa horneados, una hoja de lechuga, la hamburguesa de remolacha, la salsa de ajo, el tomate, la cebolla roja y una rodaja de pepino. ¡Y que aproveche!
2. Tarta de hojaldre con remolacha y queso azul
¿Quieres probar algo nuevo? ¡Prepara una tarta de hojaldre! Puedes tomarla para cenar, ¡aunque es ideal también para el almuerzo!
Lo que necesitarás:
- 3 remolachas
- un rollo de hojaldre
- 50 gramos de queso azul
- un puñado de nueces (sin tostar)
- 1 cebolla roja
- 75 gramos de crema fresca
- sal y pimienta
- un chorrito de leche
Precalentar el horno a 200 grados. Extender la masa de hojaldre en una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Hacer agujeros en la masa con un tenedor y untar la masa con una fina capa de leche. Mezclar la crema fresca con pimienta negra y una pizca de sal. Untar la masa con la mezcla. Cortar la remolacha en rodajas finas (0,5 cm) y colocarlas sobre la masa. Cortar también la cebolla roja en aros finos y repartirla sobre la remolacha. Por último, picar las nueces en trozos gruesos y espolvorearlas junto con el queso azul sobre la tarta. Si no eres muy fan del queso azul, puedes sustituirlo por queso feta o de cabra. Hornear el pastel de remolacha durante 25 minutos. Adornar con un poco de albahaca y jarabe balsámico.


3. Pesto de remolacha y queso parmesano
Sorprende a los demás (¡o a ti mismo!) con un colorido pesto de remolacha. Queda muy bien en la mesa y es delicioso.
Lo que necesitarás:
- 200 gramos de remolacha precocida
- 1 diente de ajo
- 50 gramos de queso parmesano (rallado)
- 50 gramos de nueces sin tostar
- un chorrito de aceite de oliva
Cortar las remolachas en trozos gruesos y mezclarlas con las nueces, el ajo y el queso parmesano en un bol. Triturar estos ingredientes con una batidora de mano hasta obtener una masa homogénea. ¿El pesto sigue algo espeso? Entonces vierte un poco de aceite de oliva. Condimentar con sal marina y pimienta negra. Está delicioso como aderezo en una baguette crujiente.








