Planchar es una actividad que tiene defensores y detractores por igual. ¿Eres de las que tararea, canta o hace ejercicio mientras plancha? ¿De las que se abstrae en sus pensamientos? ¿O de las que prefiere delegar? Sea cual sea la respuesta, ¿sabes identificar una funda desgastada?
¿Qué es una funda para tabla de planchar?
Es una capa protectora que se coloca alrededor de la tabla justo antes de empezar a planchar. Puedes atarla con un cordón y un tensor para que no se mueva de su sitio. Las fundas están formadas por una capa superior de algodón y una inferior de fieltro. Su misión es proteger la tabla del calor y el vapor que genera la plancha. Además, facilita el planchado para que las prendas queden perfectas.
¿Cuándo cambiar la funda de la tabla de planchar?
En función de la cantidad de ropa y el tamaño de tu familia, tendrás que planchar con más o menos frecuencia. Si tienes muchas blusas, camisas y pantalones, seguramente tendrás que planchar bastante a menudo. También hay que tener en cuenta que una familia de cinco personas tendrá que planchar con más frecuencia que una pareja o alguien que vive solo. De media planchamos una vez a la semana. Por lo tanto, la funda hay que cambiarla cada tres años.
¿Qué pasa si no cambias la funda de la tabla de planchar a tiempo?
Las fundas desgastadas son como los francotiradores: no les ves venir. Por eso te recomendamos crear un recordatorio en el calendario. ¿Recuerdas cuándo compraste la funda de la tabla de planchar? Si es así, súmale tres años a esa fecha y apúntalo en el calendario. Si no recuerdas la fecha exacta, haz un cálculo aproximado. Si no la cambias a tiempo, tendrás que planchar con una funda desgastada. Tanto la capa superior de algodón como la interior de fieltro perderán calidad. ¿El resultado? Ropa manchada o incluso dañada.
